Cueva del Agua, Tíscar. Quesada (Jaén) |
Hacía varios años que no visitaba la zona. Llevar a mi familia política fue todo un pretesto para regresar a la zona.
Llegamos a Quesada sobre las 9.30 y, al llegar, estuve a punto de coger la carretera de Huesa para llegar a la Cueva del Agua, pero lo pensé mejor y decidí enseñar a la familia el puerto de montaña.
Era una escapada de un sólo día y decidimos no parar en el pueblo (Quesada), lo que fuimos subiendo con el coche dirección Pozo Alcón y dejando el museo Zabaleta a la izquierda para alcanzar la subida del puerto.
Una vez realizada la parada en el Santuario retomamos el camino, siempre sentido Pozo Alcón, y tras pasar el túnel excavado en su propio roca ya pudimos advertir el aparcamiento del mirador de la Cueva del Agua. Decidimos no bajar el coche hasta la propia entrada de la cueva, sino dejarlo junto al mirador y bajar andando.
A mi hijo, la cueva le pareció todo una aventura desde que descubrió su entrada, un pequeño túnel de escasa altura (más propio de su edad que de la nuestra) excavado directamente en la roca. Aguantó como un campeón todas las escaleras y disfrutó Enormemente con el agua.
Poco antes del cruce con la carretera de Pozo Alcón-Hinojares nos encontramos una señal indicativa de Cuenca. Sí, así como suena, en plena Sierra de Quesada (Sierra Cazorla) y en la provincia de Jaén un cartel indicativo de Cuenca.
No nos lo pensamos y nos dirigimos hacia esta aldea perteneciente al Municipio de Hinojares (Jaén).
Se trata de una aldea de pocas casas muy dispersas, aunque con un grupo de ellas junto al nacimiento del río Turrillas, en una zona de recreo conocida como "Las Siete Fuentes". Esta zona se notaba había sido objeto de inversiones por parte del Ayuntamiento de Hinojares no mucho tiempo antes. Habían adoquinado parte de la orilla del nacimiento, colocado una zona infantil y también disponía de bancos y mesas de madera. Esto fue todo un acierto, ya que pretendíamos hacer un "picnic" para comer.
El regreso, y dado el tiempo transcurrido, deidimos realizarlo por Huesa hasta el punto de partida de esta ruta: Quesada.
Mientras subíamos por el puerto, y justo antes de alcanzar su cima (que creo recordar es algo así como unos 1024 m de altura), lo primero que sorprendió a la familia fue lo pequeño y bajo que quedó Quesada, ya que antes de llegar al pueblo quedaba encima de un cerro. Una vez pasada la cima del puerto, la carretera aún serpenteante no hacía mas que bajar, hasta llegar al Santuario. El santuario fue un parada obligada y un buen lugar para preguntar sobre los parajes olvidados.
Santuario de Ntra. Sra. de Tíscar (Quesada) |
cueva del Agua |
A mi hijo, la cueva le pareció todo una aventura desde que descubrió su entrada, un pequeño túnel de escasa altura (más propio de su edad que de la nuestra) excavado directamente en la roca. Aguantó como un campeón todas las escaleras y disfrutó Enormemente con el agua.
Cueva del Agua |
Eran casi las 14.00 h cuando salimos de la cueva. Las escaleras de subida y la cuesta hasta el coche, aunque de pocos metros, hacía mella en nosotros no muy acostumbrados a realizar casi ningún esfuerzo físico.
Decidimos, dada la hora, buscar un sitio para comer. Las opciones podrían haber sido el regresar al restaurante del santuario o ir hacia Huesa, pero como disponíamos de comida preparada en casa, decidimos aventurarnos a continuar por la carretera de Pozo Alcón y llegar hasta Hinojares.Poco antes del cruce con la carretera de Pozo Alcón-Hinojares nos encontramos una señal indicativa de Cuenca. Sí, así como suena, en plena Sierra de Quesada (Sierra Cazorla) y en la provincia de Jaén un cartel indicativo de Cuenca.
No nos lo pensamos y nos dirigimos hacia esta aldea perteneciente al Municipio de Hinojares (Jaén).
Nacimiento del rio Turrillas. Cuenca (Hinojares, Jaén). |
El regreso, y dado el tiempo transcurrido, deidimos realizarlo por Huesa hasta el punto de partida de esta ruta: Quesada.
Hola me ha encantado tú blog, me ha recordado cuando hace años, visite la Cueva del agua y el Santuario de Tíscar
ResponderEliminarSi, para mí también fue recordar viejos tiempos
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